lunes, 5 de octubre de 2009

El jetlag

Continuando con las anécdotas, las cuales llevamos un tanto atrasadas por cierto, les quería comentar que el asunto del cambio de horario no es nada fácil. El día que llegamos pasamos del aeropuerto directo al acommodation, dejamos el bolsero, nos arreglamos y nuestro amigo Manolito nos llevo a dar unas vueltas por las zonas cercanas a donde nos estábamos quedando. Amablemente nos dio los respectivos consejos y nos mostró los principales lugares, bien útiles por cierto (muchas gracias Manolito por las atenciones y la ayuda brindada, un millón). Para el momento estábamos muy bien, embelesados con la ciudad y tantas cosas nuevas y diferentes, así que del sueño y el cansancio ni nos acordábamos. Luego seguimos en grata compañía buena parte de la tarde, fuimos al supermercado a comprar cosas para cenar y desayunar. Ya a las 4 pm el agotamiento era evidente, pero agradecemos enormemente a Manolito incluso por mantenernos ocupados, porque si nos hubiésemos quedado en el hotel nos habríamos ido a dormir de inmediato.

Lo cierto fue que llegamos al hotel cerca de las 6 pm y paso poco antes que nos rindiéramos al sueno. Ya a las 7 pm estábamos dormidísimos. Obviamente al otro día como a las 3 y 30 am nos despertamos.

Ese día Lunes en la tarde sentimos nuevamente el sueño y la pesadez, sin embargo intentamos hacer un esfuerzo sobrehumano por prolongar la hora de ir a dormir, pero lo más que pudimos fue una hora más, 8pm. El sueño después de las 6 pm era terrible, se nos cerraban solos los ojos y lo peor era tener que seguir aguantando, pero era necesario para adaptarnos. Ya para el Jueves estábamos durmiendo bien.

La recomendación es que el día que lleguen no se queden en el hotel, y los primeros días traten en lo posible de acoplarse a la hora local, no es fácil pero es sin duda lo mejor.

2 comentarios:

Gabriela dijo...

Hola Diana.... Uy sí, debe ser bien heavy lo del horario, pero es que es realmente imposible tratar de adaptarse desde aquí, la diferencia es demasiada!!!! Anyway, el cuerpo es muy sabio y en pocos días está listo.... Que bien que conocieron a Manolito, seguramente nosotros también lo conozcamos eventualmente.... SaludillOZ

Diana dijo...

Si Gaby, es rudo rudo. Hay que esforzarse mucho esos primeros días por adaptarse, sino creo que tomaría mucho mas tiempo. Si Manolito es lo máximo, nos ha ayudado muchísimo. Seguro cuando vengan lo conocen ;)
Saluditos por allá